martes, 19 de noviembre de 2013

Esquiar en Madrid (Temporada 2013-14)



Como habréis notado en la última semana, el invierno ya se acerca. O quizás ya está aquí. Tras un otoño más cálido de lo habitual, en los últimos días han aparecido –por fin– las primeras nieves en prácticamente toda España. La sierra de Madrid ya luce una silueta blanca, la habitual durante los inviernos, y ello nos recuerda que la temporada de esquí ya está a la vuelta de la esquina. O lo que es más interesante para vosotros, es posible esquiar sin salir de la Comunidad de Madrid.

Pista de esquí en la estación de Navacerrada.
Debéis saber, en primer lugar, que las mejores, más grandes, y más famosas pistas de esquí de España están situadas en el macizo montañoso del Pirineo, en nuestro límite natural con Francia y Andorra, y también en Granada –en pleno corazón de Andalucía por curioso que os pueda parecer–, pues éste es el lugar donde se encuentra la montaña más alta de la Península Ibérica; el pico Mulhacén. Pongo a vuestra disposición un link en el que podréis tener más información sobre éstas (y todas) las pistas de esquí en España. Las complejas estaciones invernales del Pirineo presentan larguísimas pistas para disfrutar de la nieve, así como puntos específicos para distintas modalidades, ya sea esquí de fondo, alpino, snowboard, etc. Lo mismo sucede en la gran estación de Sierra Nevada –en Granada–, y por ello son los lugares que entendemos como los más adecuados y acondicionados para esquiar en España. Pero sin embargo también debéis saber que son muchas más las estaciones y los lugares que existen para la práctica de los deportes invernales, y que están repartidos por toda la geografía nacional. 

Sin embargo España, no lo olvidéis, es el sur de Europa. Quiero decir que las condiciones climáticas para que se produzcan intensas nevadas no son las más adecuadas del continente, o dicho de otra manera, son las menos favorables. Por esa razón debéis informaros de las condiciones “reales” de las muchas estaciones de esquí que hay en nuestro país antes de ir a ellas, y este consejo es especialmente importante en el caso de las madrileñas, pues dependiendo del clima no pueden garantizar la calidad de la nieve durante todo el invierno. Podrían estar parcialmente cerradas por falta de nieve, o completamente cerradas por mala climatología. Un vistazo a la web de la propia estación invernal puede ser suficiente.


En esta entrada os planteamos la posibilidad de esquiar en un día, sin grandes viajes al Pirineo (Cataluña o Aragón) o a Sierra Nevada (Andalucía) y sin demasiadas horas de desplazamiento. Sabed que hasta tres estaciones de esquí existen en las cercanías de Madrid. Al norte de la capital, en la sierra que nos separa de la Comunidad Autónoma de Castilla y León, es donde están situadas todas. La fecha habitual para su apertura al público suele situarse en la primera semana de Diciembre, siempre que la cantidad y calidad de la nieve lo permita, y de momento parece que este año no se va a adelantar la fecha (a priori, abrirán sus puertas el día 6 de Diciembre). Es decir, hasta la primera semana de Diciembre, las estaciones de Madrid no estarán abiertas al público.

Pista de esquí y remonte en la estación de la Pinilla.
También debéis tener en cuenta que estas estaciones madrileñas no son de dimensiones gigantescas pues ni el tamaño ni la altitud de la propia montaña lo permite; pero sí que podréis practicar los deportes de invierno con total comodidad y modernidad. Otro dato a tener muy en cuenta, es que por su cercanía a la ciudad de Madrid la afluencia de deportistas es bastante elevada, y puede resultar especialmente incómodo los fines de semana y festivos. Por lo tanto, el consejo, es que en la medida de vuestras posibilidades acudáis a ellas en días “semanales” (el viernes puede ser un día fantástico), pues encontraréis menos gente tanto esquiando, como en los transportes públicos que os llevarán a ellas, que si lo hicieseis un sábado o un domingo.

La compra del “forfait” o “abono” para esquiar en cualquier estación española os da derecho a utilizar todas las pistas y sistemas mecánicos de remontes; pero además os otorga un seguro si sufrís algún accidente deportivo. ¡Atención!, para poder hacer efectivo este seguro debéis seguir escrupulosamente las normas y sistemas de prevención y seguridad de cada estación de esquí, y en cualquier caso, este seguro nunca será efectivo si el accidente deportivo se produce “fuera de pista(es decir, fuera de los límites señalizados de las pistas de esquí), o por incumplimiento de alguna norma de seguridad. En este caso, la responsabilidad legal y asistencia médica será del propio esquiador o deportista. Resumiendo, cumplid las normas, porque merece la pena, y una caída esquiando entra dentro de la más absoluta normalidad. Por último os quiero informar de que todas las estaciones disponen de servicio de alquiler de todo el material –incluidas las botas, pero no el resto de la ropa– necesario para la práctica de los deportes de nieve.



Plano de la estación de la Pinilla.
La Estación de esquí de La Pinilla es la más lejana de la ciudad de Madrid, pues está situada a unos 125 kms de la capital. Dispone de 24 pistas señalizadas, de distinta dificultad y longitud, y un total de 13 remontes. En total unos 20 kms. esquiables, siendo su pista más larga de 3,6 kilómetros. Cuenta además con un parque para snowboard que se ha remodelado hace tan sólo dos años. Se trata de una estación de tamaño mediano (en el cómputo de las pistas españolas), muy bien señalizada para la práctica de deportes y con buenas instalaciones. A su favor está el hecho de que es la que tiene la menor afluencia de público de las tres estaciones cercanas a Madrid, sencillamente porque es la más lejana a la capital. En su contra está precisamente esta lejanía, y por ello presenta el acceso más incómodo con transporte público ya que no presenta una alta frecuencia de autobuses desde Madrid. Además, para llegar a ella tendréis que combinar dos autobuses. El primero de ellos, de la compañía Continental Auto (Alsa) os llevará desde el Intercambiador de la Avenida de América hasta la localidad segoviana de Riaza en un viaje que dura aproximadamente dos horas. (Las plazas son limitadas. Si estáis completamente seguros de que iréis, comprad el billete al menos con un día de antelación). Una vez en Riaza, desde la propia estación de autobuses, existe un servicio gratuito de autobuses que os llevará directamente a la estación de esquí, siempre que hayáis comprado el “forfait” para el día. Éste se puede comprar en la oficina de Turismo de Riaza.



Plano de la estación de Navacerrada.
La segunda de las estaciones de esquí cercanas a Madrid es la Estación de esquí de Navacerrada. Quizás la más emblemática o famosa para los madrileños. Está situada en la Sierra de Guadarrama, concretamente entre los puertos de Navacerrada y Cotos. La estación nos presenta casi 11 kilómetros preparados para esquiar, y repartidos en 16 pistas de distinta longitud y dificultad; todo ello acompañado de 9 remontes mecánicos para ascender a las pistas. En conjunto es una estación mucho más modesta que la anterior en cuanto a tamaño, pero no en cuanto a instalaciones y servicios, que son muy aceptables. A su favor la cercanía a Madrid, el hecho de que todas sus pistas estén preparadas para esquí y snowboard, y la facilidad para llegar a ella con transporte público. En su contra la masiva afluencia de público los fines de semana y festivos, que genera no sólo masificaciones en las pistas, sino incluso problemas de tráfico en los accesos a la estación, y tal vez el tamaño de la estación, que no es suficientemente grande para tanto volumen de asistencia.

Para llegar hasta la estación de esquí de Navacerrada tenemos dos opciones de transporte público. La primera de ellas es el Autobús 691 de la EMT (compañía Larrea) que sale desde el Intercambiador de Moncloa (Isla 2, dársena 21) con una frecuencia de un autobús por hora los fines de semana, y de dos a la hora (por las mañanas) durante los días de semana. La otra opción de transporte público, un poquito más lenta, es el tren. Para llegar a la estación de esquí de Navacerrada con Cercanías Renfe, deberemos tomar la línea C8b (desde las estaciones de Atocha, Recoletos, Nuevos Ministerios o Chamartín) hasta la localidad de Cercedilla. Una vez llegado a Cercedilla, deberemos cambiar al conocido como “Tren de Cotos”, (línea C9) en realidad una especie de tranvía, que nos transportará los últimos kilómetros hasta la estación de esquí de Navacerrada en un pintoresco viaje por la sierra.



Plano de la estación de Valdesquí.
La tercera de las estaciones de esquí de la sierra madrileña es la Estación de esquí de Valdesquí, que está situada a tan sólo 80 kms. de Madrid, y a muy poca distancia de la de Navacerrada. Situada en la boca de un valle, sus pistas se reparten por las laderas de cuatro montañas, que convergen en la zona de servicios centrales de la estación. En total dispone de 20 kilómetros esquiables, repartidos en 27 pistas de diferente dificultad y longitud, con 15 remontes mecánicos para hacer ascender a los esquiadores. Presenta además un “snowpark” y un estadio de competición. A su favor presenta, como Navacerrada, la cercanía a Madrid y la disposición “protegida” del conjunto de la estación, gracias a su situación en el valle, e incluso una menor masificación en los días más concurridos. En su contra decir, que de acuerdo a esquiadores experimentados, algunas de sus pistas situadas a mayor altitud, pueden resultar difíciles si somos sorprendidos por ventiscas o malas condiciones ambientales, pues en este caso no se encuentran protegidas de manera natural por la montaña de las inclemencias del viento.

Para llegar a la estación de esquí de Valdesquí con transporte público también tenemos las dos opciones de autobús y tren. Si elegimos la red de Cercanías Renfe, el recorrido es exactamente el mismo que para ir a Navacerrada. Es decir, desde Madrid tomaremos la línea C8b hasta la localidad de Cercedilla, donde cambiaremos a la línea C9 o “Tren de Cotos”, que en este caso no abandonaremos en Navacerrada, sino que continuaremos en él hasta el final de su línea (18 kms en total.) en la estación de “Cotos”. Desde allí, ya tenemos el autobús lanzadera gratuíto para los dos últimos kilómetros hasta las instalaciones de Valdesquí. Si por el contrario, elegimos el autobús, la línea es, al igual que para Navacerrada, la 691 de la EMT (Compañía Larrea), que sale desde el Intercambiador de Moncloa (Isla 2, dársena 21). Desde Madrid hasta Valdesquí, que es la última parada de la línea, el tiempo aproximado de trayecto será de 90 minutos. Pero poned atención al comprar el billete o consultar el horario, pues no todos los autobuses de la línea 691 finalizan en Valdesquí, sino que algunos finalizan en la localidad de Navacerrada.



Por lo tanto, si os gusta la nieve y los deportes invernales, aprovechad la posibilidad que os brinda la sierra de Madrid: esquiar a poca distancia de casa, de una forma bastante cómoda y sencilla, y con acceso en transporte público. Eso sí, recordad que normalmente las estaciones de esquí madrileñas no abren antes de el día 6 de Diciembre (festivo en toda España) y que es muy importante comprobar y asegurarse de las condiciones del clima y la calidad de la nieve antes de asistir. Y tened en cuenta que estas tres estaciones, especialmente Navacerrada, puede contar con una afluencia de público exageradamente alta. ¡¡Disfrutad del esquí!!







IYP

miércoles, 6 de noviembre de 2013

Celebrar Thanksgiving en Madrid (2016)

Esta semana se celebra Thanksgiving. O como decimos en España, “el día de acción de gracias”. Es posiblemente la más antigua de todas las fiestas netamente estadounidenses y también posiblemente una de las más desconocidas en nuestro país, ya que la mayoría de los españoles que han oído hablar de esta festividad, a menudo desconocen su origen. La razón es que  Thanksgiving no se celebra en España. Esta celebración tan sólo es habitual en Estados Unidos, Canadá y Puerto Rico, y por esta razón los españoles no sabemos muy bien qué es esta fiesta, qué se celebra, o cómo hay que celebrarla. Evidentemente, por estas mismas razones resulta un poco complicado –la realidad es que cada vez es más facil– encontrar un lugar en Madrid donde nos ofrezcan la tradicional cena de este día.Y por las mismas razones os animamos a vosotros, estudiantes norteamericanos en España, a compartir, mostrar y hacer participar a vuestras familias "de adopción" y amigos españoles en esta fiesta para vosotros tan sentida.

The first Thanksgiving (Jean L. Gerome Ferris 1863-1930)
No pretendemos desde este blog explicaros a vosotros qué es Thanksgiving. Lo sabéis mucho mejor que nosotros. Pero sí que queremos daros una pequeña herramienta para que se lo expliquéis a vuestros amigos y "familia" española, y a la vez facilitaros la información básica sobre dónde o cómo celebrarlo en Madrid. Por lo tanto, en esta entrada os damos una breve información histórica para que la podáis compartir con aquellos que queráis, y posteriormente, al final de esta misma entrada, os dejamos información práctica sobre cómo y dónde encontraréis todo lo necesario para celebrar Thanksgiving en casa, o en alguno de los pocos restaurantes que lo celebran en Madrid. Como ya dijimos, es una fiesta que nunca se ha celebrado en España, y por tanto no es facil, pero tampoco es imposible.


El día de acción de gracias se ha convertido en Estados Unidos en la principal fiesta tradicional, familiar y laica. Nos cuenta la historia cómo hacia el año 1620 un pequeño grupo de europeos, principalmente ingleses y en menos cantidad holandeses, partieron en un barco –el Mayflower– desde las costas europeas hacia el continente americano, ansiosos de la libertad de culto religioso que no estaban encontrando en sus países de origen. Su destino parece ser que era Jamestown (en la actual Virginia), pero por las tormentas y la mala mar su barco fue desviado de la ruta. En noviembre de 1620 tocaban finalmente tierra en el norte de Plymouth (actual Massachusetts) donde decidieron fundar un asentamiento, de aproximadamente unas 300 personas.

Nos sigue contando la historia que el primer invierno al que tuvieron que enfrentarse nada más llegar fue especialmente duro. Las bajas temperaturas, el desconocimiento del lugar, y la inexperiencia de los colonizadores provocó la muerte de un gran número de ellos; bien por hambre, bien por enfermedades; diezmándolos a la mitad. Sin embargo, a la primavera siguiente los habitantes indígenas del lugar establecieron lazos de amistad con los recién llegados y les enseñaron cómo sembrar y cultivar el maíz, y cómo criar y cazar a los animales autóctonos. Fue así como en el otoño de 1621, después de una primera y buena cosecha, el Gobernador de los colonos proclamó "un día para dar gracias al Señor y regocijarnos después de haber recogido el fruto de nuestro trabajo". En un gesto de amistad, los colonizadores invitaron a los indígenas vecinos para celebrar juntos una fiesta, en la que compartieron pavos y gansos, venados, maíz, frijoles, calabazas, y frutos secos.

Un año después (1621) la fiesta no se pudo volver a celebrar debido a una pobre y mala cosecha. Sin embargo en 1623 el Gobernador decidió volver a celebrarlo y por ello proclamó el 30 de julio como el “Día de Acción de Gracias”. En esta ocasión, en realidad, se estaba celebrando el final de un largo periodo de sequía, pero también se quería agradecer a los vecinos indígenas su amabilidad por haber compartido sus conocimientos. Desde entonces la fiesta se celebró siempre que fue posible en esta área geográfica de lo que hoy son los Estados Unidos de América.

Menú tradicional de Thanksgiving.
La verdadera institucionalización de Thanksgiving como fiesta nacional norteamericana sucedió inmediatamente después de la unión de las primeras trece colonias. En 1789, el Presidente George Washington presentó ante el Congreso la propuesta para la celebración de un día de “acción de gracias y de oración pública”. La propuesta fue aprobada, y el primer día “oficial” de Thanksgiving fue celebrado el 26 de noviembre de 1789. En la proclamación correspondiente George Washington instó a los americanos a dar gracias a Dios por su protección, por la victoria en la lucha, por la libertad y por la paz y prosperidad en el nuevo país.

Sin embargo la festividad aún no quedó completamente fijada en el calendario. De hecho, no fue celebrada de manera oficial todos los años consiguientes. Sería en 1846, cuando Sarah Hale, editora del Godey’s Lady Book, comenzó una campaña para convertir el Día de Acción de Gracias en una fiesta nacional, hecho que no sucedería hasta justo antes del inicio de la gran guerra civil estadounidense. El día 3 de octubre de 1863, el Presidente Abraham Lincoln declaró la primera proclamación oficial del Día de Acción de Gracias desde la celebración en tiempos de George Washington. Y ahora sí, desde entonces la celebración nunca ha dejado de festejarse fijándose el cuarto jueves de Noviembre como día de Thanksgiving. El patrón general de esta celebración también se ha conservado igual desde el Siglo XIX. El menú básico, con pequeñas variaciones regionales, generalmente sigue consistiendo en pavo relleno al horno, salsa de arándanos, pan de maíz, boniatos y pastel de calabaza. 



La celebración en Madrid de Thanksgiving puede resultar un poco compleja. Por un lado, al no ser una fiesta habitual en el país, es complicado encontrar un restaurante donde preparen el menú; y por otro lado incluso algunos de los ingredientes necesarios para preparar la cena en casa pueden ser difíciles de encontrar. En ocasiones los arándanos, poco habituales en las tiendas españolas, y más difícil aún el pavo que rara vez se vende entero –listo para poder ser rellenado–. Por eso queremos desde este blog facilitaros un poco el trabajo, e incluso animaros a hacer partícipes a vuestras familias españolas en una fiesta tan importante para la cultura estadounidense.




TIENDAS Y SUPERMERCADOS en los que podréis encontrar los ingredientes para preparar la cena en casa –generalmente por encargo, así que no lo dejéis para el último día–.

Taste of America.
Calle Serrano, número 149. (Metro L6, parada República Argentina).
Calle Cea Bermudez, número 58-60. (Metro L7, parada Islas Filipinas).
Calle San Marcos, número 20. (Metro L5, parada Chueca)

The American Store.
Calle San Martín de Sales, número 3 - 5. (Metro L7, parada Islas Filipinas)

My american market.
Sin tienda física en Madrid, sólo para compras por Internet. (caro, pero efectivo). Sección especial para la celebración de Thanksgiving y otras festividades americanas.

Supermercados Sánchez Romero.
Varios supermercados que suelen tener todos los ingredientes, y que están repartidos por la ciudad: Paseo de la Castellana 196, Calle Sor Ángela de la Cruz 10, Calle Corazón de María 62, Centro Comercial Mirasierra en la calle de Nuria 59…

Supermercados de El Corte Inglés.
La mayoría de los centros comerciales de la marca El Corte Inglés tienen supermercados -generalmente en la planta baja o sótano-. En ellos, y más específicamente en la sección "gourmet" podréis encontrar sin gran dificultad los ingredientes necesarios (generalmente sólo durante las fechas cercanas a Thanksgiving).



RESTAURANTES donde podéis encontrar el menú tradicional de Thanksgiving –generalmente por encargo o con reserva–.

The American Club of Madrid.
Celebración de Thanksgiving en el Hotel Hesperia. El precio por persona oscila entre 38,00 y 80.00 € Imprescindible vestir de etiqueta, e imprescindible reserva previa. (Menú tradicional)

Restaurante Cornucopia.
Menú especial de Thanksgiving con varias opciones (46.00 €). En su web podéis acceder al menú en el link “menús”.
Calle Navas de Tolosa, número 9. Metro L3 y L5, parada de Callao.


Gumbo Ya-Ya
Restaurante de cocina tradicional sureña (Nueva Orleans). El año pasado ofreció un menú específico para la noche de Thanksgiving. Confiamos en que este año también lo hará, aunque de momento ni en su web, ni en su blog está anunciado. ¡estad atentos a su web!
Calle Pez, número 15. Metro L1 y L10, parada Tribunal. Metro L2, parada Noviciado.


Pecado Carnal.
Esta franquicia especializada en carnes se anima este año a celebrar Thanksgiving con un menú especial, y con unas condiciones especiales. En turno de almuerzo o cena, y sólo en su sede de Chamberí, menú "all you can eat".  (39.95€) 
Calle Covarrubias, número 24. (Metro L4, L5 y L10, parada Alonso Martínez)

NewYork Burguer.
Los varios locales que esta hamburguesería tiene en Madrid ofrecen desde hace varios años una manera barata y diferente para celebrar Thanksgiving. Su apuesta es una hamburguesa hecha a base de carne de pavo, con salsa de arándanos, y patatas fritas. Se acompañaba de Pecan Pie como postre.
Calle General Yagüe, número 5 (Metro L10, paradas de Santiago Bernabeu o Cuzco)
Paseo de Recoletos, número 4 (Metro L2, parada Banco de España).

Calle Miguel Ángel, número 16 (Metro L7, parada Gregorio Marañón)

Home Burguer Bar.
Las sedes que esta joven compañía tiene en Madrid ofrecerán un menú conmemorativo de Thanksgiving consistente en hamburguesas de solomillos de pavo con foie fresco a la plancha, manzana caramelizada y canela. De postre ofrecen tarta de zanahoria con relleno de grosellas, nueces de macadamia y naranja confitada. (13.50€ la hamburguesa, 5.00€ la tarta).

Calle Espíritu Santo, número 12 (Metro L1 y L10, parada Tribunal)
Calle San Marcos, número 26 (Metro L5, paradas de Chueca o de Gran Vía)


Tommy Mel's. 
Ofrecerá una hamburguesa de carne de pavo, acompañada de bonitao (sweet potatoes) y maíz, en todos los restaurantes que tiene en el centro de Madrid. Más información en su web, pues tiene promociones online.
Calle Pedro de Teixeira, número 8 (Metro L10, parada Santiago Bernabeu)
Calle de Hortaleza, número 34 (Metro L5, paradas de Chueca, Metro L1, L5, parada de Gran Vía)
Calle de Goya, número 5 (Metro L4, parada Colón)


Hard Rock Cafe
Menú especial de Thanksgiving. Es obligatoria la reserva previa, y el último día para reservar es el 25 de Noviembre. Más información: madrid_sales@hardrock.com (Precio del menú: 30.95€)
Paseo de la Castellana, número 2. (Metro L4, parada de Colón)

Taxi a Manhattan
Menú especial de Thanksgiving, consistente en pastel de pavo con stuffing, puré de patatas, verduras, maíz y tarta de calabaza.
Calle de la Basílica, 17. (Metro L6 y L10, parada Nuevos Ministerios)










¡¡Feliz día de acción de gracias!!

IYP









martes, 15 de octubre de 2013

Tenerife: sol y nieve en mitad del Atlántico.




La isla de Tenerife recibe su nombre del viejo idioma idígena: montaña blanca, eso es lo que significa “Tenerife” en guanche.  Y la definición no puede ser más acertada porque si algo destaca por encima de cualquier otra cosa al llegar allí es la cumbre nevada de la montaña más alta, no del archipiélago de las Islas Canarias, sino de toda España con sus 3718 metros: el volcán Teide. Blanco por la nieve que acumula durante gran parte del año, aunque es verdad que dependiendo de la estación, o incluso del día, lo podremos encontrar perfectamente blanco, o sencillamente oculto por nubes o gases sulfurosos que nos recuerdan su actividad volcánica.

Parque Nacional del Teide (Tenerife)
Tenerife, o cualquiera de las otras islas que integran el archipiélago y Comunidad Autónoma de las Islas Canarias, es un perfecto destino para descubrir una de las caras más alegres, diferente y variada de la totalidad de España. Es además el verdadero nexo y puente de unión entre la herencia de la cultura y tradición de la España peninsular y las antiguas colonias, hoy naciones, hispanoamericanas. Estas islas fueron hasta tiempos no muy lejanos un punto importante y una parada obligatoria en las rutas entre el viejo y el nuevo continente, en cualquiera de las dos direcciones que se hiciese el viaje por mar. Por eso el acento de sus gentes, muchas palabras, o incluso algunas costumbres y fiestas nos llegarán a recordar el continente sudamericano. Y no olvidemos otra razón importantísima para conocer Tenerife: sus playas e infraestructuras turísticas están entre las mejores y más bonitas de España con el inmejorable aliciente de que durante todo el año; habéis leído bien, todo el año; la temperatura media de sus costas es de unos 20º a 22º. Pues ahí va la pregunta: ¿queréis bañaros y tomar el sol durante el otoño o el invierno?... Tenerife, Gran Canaria o Lanzarote son vuestro destino ideal.

Ideal porque a pesar de la distancia –unos 2000 kms–  que separa a las islas de Madrid, Tenerife cuenta con varios vuelos directos todos los días, durante todo el año, e incluso con dos aeropuertos. Esto se explica por su elevada población local que ronda el millón de habitantes repartidos en 2034 km2, pero sobre todo por el gran volumen de turismo que la visita durante todo el año, y más específicamente durante el invierno: más de siete millones al año entre todas las islas. Pensadlo bien, mientras en Europa y en la Península sufrimos los rigores del invierno, con lluvia, frío, nieve… en Tenerife la gente está en la playa, disfrutando del sol y del baño, o visitando el interior de la isla con ropa ligera, o incluso en pantalones cortos.


Llegar a Tenerife es por lo tanto sencillo, y a menudo bastante económico, sobre todo si elegimos compañías de bajo coste o “temporada baja” de turismo. Evidentemente podemos viajar a Tenerife en barco, principalmente desde Cádiz, pero esto sólo alarga el viaje, además de encarecerlo, y desde este blog tan sólo queremos animaros a conocer la isla durante un largo fin de semana. Desde el aeropuerto de Madrid Barajas disponemos de conexiones directas y diarias con Iberia, Air Europa o Ryanair. Y en unas dos horas y media estaremos en la isla. Fijaos bien al comprar el billete porque estas mismas compañías realizan vuelos no directos –con alguna escala– y evidentemente esto alargará el viaje, aunque también es verdad que por la misma razón en ocasiones lo abarata, cuestión que quizás merezca la pena sopesar. La otra razón importante para tener en cuenta todos los detalles del billete es que en Tenerife hay dos aeropuertos: Tenerife Norte Los Rodeos y Tenerife Sur Reina Sofía; y aunque en principio esto no es un gran problema porque el tamaño de la isla no implica desplazamientos muy grandes o incómodos, tal vez sea buena idea buscar la cercanía a vuestro hotel, o a la zona más turística por excelencia que es el sur. De cualquier modo, una vez en Tenerife, sus dos aeropuertos están perfectamente conectados entre sí con autobuses de línea regular que también circulan por la mayoría de las poblaciones costeras turísticas; y también es muy fácil contratar un servicio privado tipo shuttle, o coger un taxi para llegar a vuestro destino.

Vista del Macizo de Anaga.
¿Qué ver en Tenerife? No nos engañemos. La mayoría de la gente que visita esta isla, o cualquier otra del archipiélago canario suele buscar sol y playa y apenas conoce el interior. Y entonces vuestro destino será el sur de la isla, donde se concentran la mayoría de las infraestructuras hoteleras y turísticas, especialmente en las inmediaciones de las Playas de las Américas y los Cristianos. Pero ésta debe ser una decisión vuestra, porque en realidad toda la isla está repleta de hoteles, por supuesto incluida su capital Santa Cruz de Tenerife, y por lo tanto podréis elegir dónde dormir. Conviene saber, eso sí, que por la geografía de la isla, con el impresionante volcán en su centro que determina por completo la climatología, la mitad norte de la isla –donde está la capital– es más verde y lluviosa, y la mitad sur es más árida y soleada, aunque tranquilos, porque en ninguna parte de Tenerife pasaréis frio. La recomendación que queremos dar desde este blog es la de conocer la isla. No os limitéis a la costa. El interior de la isla es espectacularmente variado y hermoso: Tenerife es mucho más que sol y playa.


Tenerife, como el resto de las islas canarias, tiene un origen volcánico y un clima privilegiado por su situación geográfica. La conjunción de estos dos factores ha creado una isla que parece casi un pequeño continente por la variedad de paisajes, fauna y flora. Partimos de la base ya citada de que el sur es más árido que el norte, pero será una fantástica idea realizar alguna visita al corazón del territorio, y desde este blog os proponemos dos diferentes con un mismo denominador común: conocer la exquisita naturaleza de la isla. La primera de ellas es una visita a la Cordillera de Anaga, viaje fácilmente realizable en tanto que existen autobuses regulares específicamente pensados para aquellos que quieran practicar el senderismo, o simplemente caminar y disfrutar del montañoso norte de la isla. Diariamente salen autobuses desde la localidad de San Cristóbal de La Laguna, en las cercanías de Santa Cruz de Tenerife, lugar al que también se puede llegar con transporte público. La cordillera de Anaga está formada por varios picos volcánicos completamente cubiertos de una frondosa y variada vegetación por su ubicación en el extremo norte de la isla, que le confiere un clima más frío y húmedo. Aprovechad la gran cantidad de senderos señalizados para conocer su hermoso litoral rocoso, sus densos bosques, y no olvidéis subir al Pico del Inglés, visitar el Faro de Anaga en el extremo noreste, o conocer alguna de sus pequeñas y pintorescas aldeas, como puede ser el caso de Tagana.

Paisaje volcánico en el Parque Nacional del Teide.
Si en lugar de caminar entre variada y frondosa vegetación, preferís caminar por paisajes más áridos y desérticos, entonces vuestra excursión ha de ser al Parque Nacional del Teide, visita en realidad de carácter casi obligatorio para cualquier visitante de la isla. Situado en el centro de la isla, es desde el año 1954 uno de los Parques Nacionales más grandes de España, y uno de los más visitados. Al igual que en la cordillera de Anaga el territorio está lleno de senderos señalizados para las excursiones de los visitantes, pero que en este caso descubrirán el más que evidente pasado y presente volcánico de la isla y no tanto una impresionante vegetación. Mantos de ceniza, corrientes solidificadas de lava, y una impresionante variedad de materiales y minerales volcánicos de muy diferentes colores y texturas serán los compañeros de viaje, junto con una escasa pero bellísima flora en la que destaca especialmente el tajinaste rojo. Todo ello está principalmente repartido a lo largo de una depresión llamada Las Cañadas, de algo más de 16 kilómetros de longitud, y que tuvo su génesis hace unos tres millones de años durante una fuerte erupción volcánica. Sobra decir que en el centro de este lugar, se encuentra El Teide, el gigante blanco y principal volcán, secundado de otros muchos cráteres antiguos conocidos con el nombre de Pico Viejo (3134 metros, con un cráter de 800 metros de amplitud); la Montaña Blanca (2760 metros), o la Montaña Rajada (2509 metros). El volcán Teide todavía está activo, aunque su última erupción significativa tuvo lugar en el año 1798. Pero por la continua emisión de gases sulfurosos, y por la protección naturalística y científica con que cuenta, la visita a su caldera sólo se puede realizar con un permiso especial. No es el caso de los otros volcanes citados (extintos) y lugares de especial belleza, como el Llano de Ucanca, o los espectaculares Roques de García, y los muchos miradores que aunque también cuentan con lugares de acceso restringido, en general permiten una excursión mucho más accesible. El acceso al Parque Nacional del Teide se puede realizar con las líneas regulares de autobuses 348 y 342, y en el mismo parque existen dos centros de recepción de visitantes, abiertos todos los días del año (excepto el día de Navidad y el 1 de Enero), en el que se pueden conseguir todo tipo de informaciones y mapas para la visita, así como contratar rutas guiadas, o la posibilidad de visitar el Jardín Botánico o hacer uso del telesilla que nos subirá a tan sólo 200 metros de la cumbre del Teide.


Playa de Benijo (Macizo de Anaga)
Si definitivamente la naturaleza y los paisajes no son tu motivación, y lo que buscas es la playa, has de saber que Tenerife está repleta de ellas, y que ellas están repletas de turistas todo el año. Madruga si quieres coger un buen sitio, y elige alguna al sur de la isla si quieres bañarte en las mejores. Quizás las más famosas, y también por ello concurridas, son la Playa de las Américas y la Playa de los Cristianos. La una está junto a la otra, en el extremo sur, y en el lugar más edificado con hoteles e infraestructuras turísticas. Creedme si os digo que no será el lugar más bonito de la isla, pero sí el más cómodo o práctico si sólo buscamos sol, playa y diversión. Característica común de estas playas, y de muchas otras de Tenerife, es que la arena que las cubre a menudo no es la original, negra volcánica, sino fina y blanca, importada desde África. Más al sur todavía, en el verdadero extremo sur de la isla, y muy cercano al Aeropuerto de Tenerife Sur, se puede destacar la llamada “Costa del silencio”, mucho más tranquila y menos masificada que los anteriores lugares, y donde será fácil contratar una tabla de windsurf o lo necesario para cualquier otro deporte acuático, pues es uno de los mejores lugares de la isla por sus vientos perpetuos junto con la zona de El Médano, a escasos kilómetros, un poquito más al este, meca de surfistas que quieren aprovechar el cálido y continuo viento que llega desde las cercanas costas africanas.


Si vuestras inquietudes no están cubiertas con estas proposiciones, o bien por el contrario sois mucho más urbanos, evidentemente el lugar que debéis visitar es la actual capital de la isla: Santa Cruz de Tenerife. Situada al Noreste, la ciudad tomó el nombre de una cruz sagrada que hizo construir en una de sus playas el conquistador Alonso Fernández de Lugo en 1494, momento de su llegada. Hay que explicar que en aquel momento la ciudad prácticamente no existía, pues en realidad era una pequeña población de pescadores que surtía a la cercana población de San Cristóbal de la Laguna, más al centro de la isla, y antigua capital indígena. Pero el desarrollo y crecimiento de aquel pueblecito pesquero fue espectacular desde la conquista de la isla, y desde 1723 la ciudad es el centro administrativo de toda la isla tinerfeña. Su economía sigue estando todavía muy vinculada a su importante puerto, no sólo por su origen pesquero, sino también y sobre todo por su importancia estratégica para viajes trasatlánticos y su gran volumen de mercancías, tanto de importación (ninguna de las islas del archipiélago canario es autosuficiente), como de exportación, principalmente plátanos, hortalizas, y un variado número de frutas tropicales.

La ciudad de Santa Cruz de Tenerife está llena de rincones, calles, museos y tiendas que bien pueden merecer una visita. En el conjunto de la ciudad destaca su arquitectura colonial, mayoritariamente del siglo XIX, que le confiere una cierta unidad y sobre todo un carácter propio. Son edificios repartidos por su centro histórico, blancos, con uso de piedras volcánicas de variados colores y tonos para la decoración en jambas, esquinas, ventanas y torres, y con hermosísimos y elaborados balcones de madera. Aconsejamos callejear por este lugar sin olvidar visitar la Plaza de la Iglesia donde está el elegante  campanario de la iglesia de Nuestra Señora de la Concepción. Visitad también la Plaza de la Candelaria que se abre a la Plaza de España, uno de los lugares más concurridos de toda la ciudad. Si buscáis compras, la calle del Castillo será vuestro paraíso. Se trata de un eje peatonal completamente repleto de tiendas de todo tipo: desde ropa y moda, hasta objetos y artículos de artesanía, o tiendas específicamente dedicadas a la electrónica.

Arquitectura canaria en San Cristobal de la Laguna.
Los museos y monumentos también abundan en Santa Cruz de Tenerife. Entre los primeros destacan en Museo de laNaturaleza y del Hombre, situado en un antiguo hospital militar de construcción neoclásica, que ha sabido adaptar sus instalaciones. En él hay gran cantidad de elementos interactivos y multimedia dedicados a explicar la génesis, flora y fauna de las islas, pero yo destacaría especialmente su colección de cerámicas, tallas africanas en madera, y por supuesto los restos de la cultura indígena guanche, con algunas momias como objetos más curiosos y destacados. Otro museo interesante puede ser el Museo de Bellas Artes. Lejos de pensar que por su periferia sería un lugar prescindible, hay que saber que el museo contiene una gran cantidad de obras, que en gran parte son préstamos nada menos que de El Museo del Prado de Madrid. Ello explica la presencia de artistas de primerísima línea como José de Ribera. Completan la colección una seleccionada muestra de arte moderno estrictamente canario, y una colección de monedas y armaduras.

Entre las posibles excursiones urbanas por el interior de la isla, quizás la más famosa y aconsejable sea la que tiene como destino la población de La Orotava. Su nombre proviene del antiguo origen indígena, del Reino de Taoro, pero su gran crecimiento tuvo lugar a lo largo del siglo XVI en el que se construyeron la mayoría de sus iglesias y edificios históricos, en su mayoría a través de la inmigración andaluza. Aún así se trata de una de las ciudades antiguas mejor conservadas, no de Tenerife, sino de todas las Canarias. Sus calles son estrechas, se adaptan al terreno, y su relativamente grande centro histórico está repleto de hermosísimas casas de estilo canario. Destaca la Iglesia de la Inmaculada Concepción, con una fachada barroca de aires hispanoamericanos, enmarcada entre sus dos pequeñas torres, y equilibrada y colorida por el uso de materiales volcánicos. Visitad alguna de las viejas mansiones, como por ejemplo la llamada Casa de los Balcones, o la Casa del Turista: sus patios interiores son espectaculares, y no dejéis pasar la ocasión de conocer alguno de sus ricos parques, especialmente el Jardín Victoria, ubicado en un agreste barranco.



Carnaval en Santa Cruz de Tenerife.
Como siempre remarco en este blog, estas ideas son sólo algunas de las más destacadas y habituales opciones y posibilidades que ofrece este destino. Es mucho, muchísimo, lo que se queda en el tintero, y son variadísimas las posibilidades que Tenerife ofrece. Planead un poco vuestro viaje y disfrutad de él. Tenerife es un destino exquisito para irse de viernes a domingo, en cualquier momento, y en cualquier época del año. Eso sí, convendrá saber, que como el resto de Canarias, pero quizás de manera más importante, una visita durante las fiestas de carnaval puede ser interesantísimo, y a la vez complicado. El carnaval canario es el más importante de toda España. También el más diferente y singular, el más sentido y querido, y dentro de Canarias el de Santa Cruz de Tenerife brilla con luz propia. Los precios se dispararán y también el número de visitantes. Si planeáis una visita en esta época planeadlo con tiempo o no encontraréis alojamiento con facilidad. Preparaos también para las continuas aglomeraciones. Recordad que estas fiestas no son fijas en el calendario, sino que se celebran todos los años entre 10 y 14 días antes del Miércoles de Ceniza. Estas fiestas están consideradas como las más importantes de Europa dentro de las celebraciones carnavalescas, sólo por detrás de las de Río de Janeiro y Nueva Orleans. Las fiestas fueron prohibidas durante el régimen dictatorial franquista, pero han vuelto con fuerza y para quedarse: desfiles callejeros, concursos de belleza y de drag Queens, bailes de máscaras… todo en un ambiente muy festivo, musical, muy complejo y elaborado.


Como en todas las entradas de este blog, tampoco quiero despedirme sin hablar un poco de la gastronomía tinerfeña. Los principales platos tradicionales de Tenerife están compartidos con el resto de las Islas Canarias. Es cierto que en las innumerables instalaciones turísticas se está imponiendo el buffet o la comida más europea, pero no tendréis que buscar demasiado para encontrar algunos platos, o algunos restaurantes que os permitan disfrutar de los pescados, las frutas tropicales, el arroz y la patata, que son los ingredientes más habituales de la comida canaria. Probad la Sopa de Pescado, el Puchero Canario, o el Rancho Canario: una combinación de carnes o pescados elaborados en sopas que suelen incluir verduras y legumbres, principalmente garbanzos. Quizás el plato estrella de estos tipos de sopas sea la Ropa Vieja, un guiso de carne con garbanzos, tomate, patata y cebollas. Probad las tapas canarias, y no olvidéis nunca la estrella de todas ellas, las Papas arrugás: patatas cocidas en agua de mar, acompañadas de mojos (salsas) verde y rojo. Como postres encontraréis la gran variedad de frutas propias, con el plátano a la cabeza, higos chumbos, piñas y papayas. Y para finalizar una buena comida, quizás la mejor idea es degustar alguno de las bebidas locales, como puede ser el ron, elaborado con la caña de azúcar local, y al que a menudo se le añade melaza para degustarlo sólo, bien fresquito.




Video promocional de la isla de Tenerife.






IYP